lunes, 12 de noviembre de 2012

Aunque no te pueda ver.

Aún recuerdo como hace tres años volvías a casa después de clase, como cualquier dia normal. Sin saber que al abrir esa puerta iba a dejar de ser normal, que el simple hecho de ver a tus hermanos llorando al final del pasillo hizo que tu mundo cambiase en una milésima de segundo. Y aún recuerdo como te metiste en tu cuarto y te escondiste en esa esquina rogando, pidiendo y gritando que todo fuese una broma macabra.
Pero no lo era. Y a tu ángel de la guarda, se le apagó la luz. Esa mañana del 12 de Noviembre de 2009 sus pulmones decidieron dejar de respirar, su corazón de latir, y sus ojos se cerraron sin dejar que viese sus ochenta y cinco primaveras.
Y entonces todo cambió.
Ya han pasado 3 años. 1096 días. Y quizás sea que hoy es doce, o que todos los días doce tienen ese no se qué de echar de menos, de que se te salten las lágrimas y los recuerdos. Pero el caso, es que hoy arde, duele, quema, pica, y desgarra. Quizás porque esta maldita ciudad me tiene atrapada, porque es el peor Lunes de mi vida, o porque en realidad debería estar en CASA, con mis ojos grises favoritos. Será que aún me quema aquel "te quiero" que no te dije a tiempo. Será que no llegué a tiempo a la despedida, y no pude contarte todo lo que te iba a echar de menos. Y ahora te echo mas de menos que nunca. Cuesta entender como el mundo puede seguir girando sin ti. Cuesta entender porqué te fuiste. Vuelve. Vuelve. Vuelve.
Ya han pasado tres años, pero solo porque lo dice el calendario y porque los relojes nunca dejan de dar la hora. Pero no hay un solo día que al tocar ese timbre una parte de mi espere escuchar tu respiración al otro lado de la puerta, que la abras, y seas tu. Tú y tu sonrisa. Porque no sabes como la necesito.
Ahora eres nuestro ángel, mi ángel. Nuestro ejemplo a seguir, el camino que nos dejaste marcado con cada uno de tus actos, de tus palabras.

Y lo sé. Sé que sigues estando. Aunque no te pueda ver.
Te quiero.