Solo que no debió de ser así.

No lo sabes, me levanto todos los días con las mismas ganas de abrazarte, aunque no todos te lo digo.

¿Qué tienes que me hace dejar de pensar? Quiero que sepas que no tengo nada claro y que si algo no estoy segura es de lo que estoy haciendo, pero seguramente, cuando sea demasiado tarde te diré que te quería, te diré que cada mirada era un “te quiero” y cada sonrisa era un “aun no te tengo”. Y te estás escapando, y todo se hace difícil, casi imposible.

Esto lo escribo por mi, no por ti, no intento contarte nada… no sé, he querido de muchas maneras, pero así jamás. Se que haga una cosa o la otra, va a estar mal, o no del todo bien. Pero es que tu…parece que todo lo que haces lo haces bien, que siempre sabes que va a ser lo mejor, que la cabeza y el corazón siempre te piden lo mismo. Pero por mucho que tu quieras, que yo quiera, no deja de ser una locura, y hasta ahora lo aguanto, de rodillas ya casi. Estamos condicionados por todo, y aunque me joda, no siempre lo que se quiere es lo mejor.

Te juro que a nadie le he vuelto a decir que tenemos el record del mundo en querernos...

Es como caminar sobre la Antártida.

Hay días en que las fuerzas flaquean. En que comienzas a echar de menos, a recordar a los héroes de tu vida, y tu lugar favorito universal donde solías esconderte para hacerte mas fuerte. Hay días en los que piensas que deberías estar a doscientos kilómetros de distancia, en casa, en tu cama, en tu salida de socorro. Para recomponer fuerzas, y es que este Enero te está dejando sin ellas. Se te están olvidando los amaneceres de vuelta a casa con los tacones en la mano y el rimel corrido, te estás perdiendo el frío invierno, los cafés de horas y secretos, y vives pegada a esos libros, y a esa manta. Sabiendo que estas haciendo lo que te corresponde y lo que debes, pero entonces es cuando te paras a pensar si por hacer lo que debes no estas tirando por la borda los que se suponen que deben ser los mejores años de tu vida, te preguntas todas las cosas que te estas perdiendo, que estas dejando de vivir por intentar pasar el mes de Agosto tumbada bajo el sol.
Un Rey muy mago me dijo una vez "entenderás que estudiar es un sacrificio, pero también es un privilegio"
Es el sacrificio de estar a doscientos kilómetros, de los héroes de mi vida, de mis cuatro ángeles, de toda ese agua salada que te hace olvidar hasta el mayor de tus temores.
Todo tiene su recompensa, su lado bueno, todo sacrificio tiene su privilegio.
Y aunque a veces quiera romper todas las normas, dejar de hacer lo que debo y empezar a hacer lo que quiero, se que soy incapaz, no por mi, si no por ellos, por todos los que esperan algo de mi, por pequeño que sea.

Pero tranquila, porque todo pasa, y todo llega...

Que ni lo bueno es tan bueno, ni lo malo lo peor!

Al final te darás cuenta de muchas cosas. Verás que mas de veinte dias consecutivos fuera de casa no son fáciles de llevar, pero son obligatorios. Verás que el mundo del que quieres escapar, es del que no te puedes marchar, por alguna irónica razón. A la larga te das cuenta de que las heridas nunca desaparecen, que los recuerdos no se borran, simplemente aprendes a convivir con ellos, te pones tiritas de todos los colores para no reconocer esas cicatrices, para que no salgan a la luz.
Y te pasaste un siglo preguntandote porque no desaparecían... Já!, ahora lo sabes.
Ya sabes lo que tienes que hacer: Nada. Absolutamente nada.
Te pasas la vida pensando como poner tu mundo en marcha sin darte cuenta que tu mundo ya está rodando, sin ti, porque tu estas mas preocupada en que todos esos planes, que han surgido en tu loca cabeza cuando te escondes debajo de ese edredón, salgan a la perfección.
Perdiste tanto tiempo planteándote la solución a todas eso que tu llamas "problemas", buscando cosas nuevas, intentando ver el mundo con otros ojos, que ni te diste cuenta que la solución llegó hace mucho tiempo, que todo es nuevo, cada dia es nuevo, que el mundo no lo puedes ver con otros ojos mas que los que tienes y tu quieras ver.
Perdiste tanto tiempo intentando ser feliz, que no te diste cuenta de que ya lo eras.
Y es que la felicidad no viene de la mano de otros. Tu vida depende de ti. Pero no de los planes que hagas. Si no de los planes que la vida tenga hechos ya para ti. Mas fácil, imposible.

Así que relájate y disfruta.

Mientras hablas pensaré "que guapa estas, que suerte ser"

Acércate, y cuando estemos piel con piel mis manos te dibujaran, tu aroma me dirá tu edad...Hace frío, es tarde y tienes que volver, que hay alguien que te espera, seguro. Una vez mas el tiempo se nos fue.
¿Volverás? Dime si mañana volverás, como has hecho cada tarde, para contarme como muere el día...
Y se marchó, ella se alejó de el, pero como en las cartas: dos puntos, posdata, se me olvidaba, no me presente.
Solo fui testigo por casualidad, hasta que de pronto el me pregunto:
-¿Era bella no es verdad?
+Mas que la luna, dije yo.
Y el sonrió...

Ya jamás se hará reproches...

Sorprenderte es solo el principio.

Lo que quiero que sepas es que al final todo se acaba gastando, el hielo se derrite, la noche amanece, el café se enfría y la niebla acaba disipándose. Los días de verano se gastan, y los de invierno cada vez son mas fríos, al igual que los besos sin sentimiento. El amor se gasta, las relaciones se rompen, la gente viene y va de tu vida. ¿Y que es lo que nos queda?
Nos queda volver a empezar, el borrón y cuenta nueva. Nos quedan nuevos amores. Nos queda descubrir nuevos caminos, nuevos sitios, y nuevas personas. Nos queda volver a enamorarnos, nos queda volver a flotar con el primer beso, nos quedan muchas primeras citas. Nos queda lo mas bonito. Y es que si os dais cuenta, los finales casi siempre son fáciles y tristes, muy tristes. Mientras que los principios parecen imposibles, sin embargo, cuando estamos dentro de uno, pensamos que hemos alcanzado el cielo con las manos, sin darnos cuenta, que lo mejor, está por llegar.

Hasta el final. Hasta que llegue el final, pero mientras, olvídate de eso.

Si me aguantas la sonrisa, te regalo el corazón.

Siempre decías que tu eras de esas chicas que no se enamoraba a primera vista, que andaba con pies de plomo, que te cubrías las espaldas como nadie y que no le regalabas a nadie tu confianza a no ser que antes te diesen algo a cambio. Algo que valiese la pena.
Pero no cumpliste lo que prometiste. Te enamoraste a primera vista, no una ni dos, sino infinitas veces, anduviste sobre arenas movedizas y dejaste tu espalda al aire, dejando que el viento te contase los lunares. Regalaste sonrisas y confiaste ciegamente en cualquiera que se interesase por ti. Rompiste las reglas, y te rompieron el corazón. Pero también te lo recompusieron. Lloraste mares, y reíste hasta formar océanos. En apenas media vida has conocido el cielo y el infierno.
¿Sabes que te quiero decir?
Que sin conocer el infierno, no eres capaz de reconocer el cielo.

Y desde aquí arriba, todo es demasiado bonito.

Nunca es tarde para volver a empezar.

Nunca es tarde para seguir soñando. Para empezar de cero, borrar recuerdos y pasado, porque ya no tiene sentido que siga ahí, desprenderse definitiva y completamente de el y comenzar a escribir tu presente... y futuro. Todas esas cosas maravillosas que te estan pasando. Tus sueños, tu ilusiones y tus metas.
¿Año nuevo, vida nueva? Yo prefiero decir, día nuevo, vida nueva!

Así que volvamos a empezar...
:)

Let's go!