Que ni lo bueno es tan bueno, ni lo malo lo peor!

Al final te darás cuenta de muchas cosas. Verás que mas de veinte dias consecutivos fuera de casa no son fáciles de llevar, pero son obligatorios. Verás que el mundo del que quieres escapar, es del que no te puedes marchar, por alguna irónica razón. A la larga te das cuenta de que las heridas nunca desaparecen, que los recuerdos no se borran, simplemente aprendes a convivir con ellos, te pones tiritas de todos los colores para no reconocer esas cicatrices, para que no salgan a la luz.
Y te pasaste un siglo preguntandote porque no desaparecían... Já!, ahora lo sabes.
Ya sabes lo que tienes que hacer: Nada. Absolutamente nada.
Te pasas la vida pensando como poner tu mundo en marcha sin darte cuenta que tu mundo ya está rodando, sin ti, porque tu estas mas preocupada en que todos esos planes, que han surgido en tu loca cabeza cuando te escondes debajo de ese edredón, salgan a la perfección.
Perdiste tanto tiempo planteándote la solución a todas eso que tu llamas "problemas", buscando cosas nuevas, intentando ver el mundo con otros ojos, que ni te diste cuenta que la solución llegó hace mucho tiempo, que todo es nuevo, cada dia es nuevo, que el mundo no lo puedes ver con otros ojos mas que los que tienes y tu quieras ver.
Perdiste tanto tiempo intentando ser feliz, que no te diste cuenta de que ya lo eras.
Y es que la felicidad no viene de la mano de otros. Tu vida depende de ti. Pero no de los planes que hagas. Si no de los planes que la vida tenga hechos ya para ti. Mas fácil, imposible.

Así que relájate y disfruta.